martes, 8 de noviembre de 2011

Editorial Noviembre

Pese a que en Octubre la justicia se hizo presente en nuestro parlamento no tenemos nada que festejar, los desaparecidos aun son desaparecidos y las familias aun aguardan respuesta. Podrá hablarse de inconstitucionalidad y un montón de otras cuestiones como el voto de la mayoría, cuando se trata de justicia y de Derechos Humanos la mayoría no cuenta, su hay muerte, tortura y desaparición si mas del 50% decide que es mejor olvidarlo es de seguro que o no conoce del tema o no lo torturaron ni le desaparecieron un hermano, un nieto, un padre o madre o un hijo. La ley se demoró en caer el gobierno de turno demoro seis años en hacerse cargo de una cuestión más que importante en nuestra sociedad. La ley de caducidad en pocas palabras permite que cualquier delito ocurrido dentro de los cuarteles militares y cárceles en el proceso de dictadura cívico militar así como atentados por parte de militares en la vía pública quede sin juicio. Por lo tanto sin importar un referéndum la justicia debe prevalecer ante cualquier decisión ciudadana. No es autoritarismo es justicia y negligencia de un gobierno demagógico y poco responsable que permitió que esto pasara a votación de un pueblo poco informado. Hoy la tierra habla nuevamente, nuevos restos aparecen para todos aquellos que dicen que en la dictadura no paso nada, aun queda mucho por hacer. El proceso de sanación recién comienza.
Por otra parte retrocedemos un paso en lo que es conciencia social, la ignorancia otra vez nos gana, y los medios de comunicación masivos ayudan a que el miedo nos nuble el razonamiento. Más de 250 mil firmas se consiguieron para enjuiciar a adolescentes como si fueran adultos, lo que aun no han dicho los propulsores de este acto aberrante es en que ayuda este procesamiento. Para cerrar, recordamos el bochornosos amigismo con el presidente Piñera de parte de nuestros mandatarios ¿acaso desconocen la actitud fascista que tiene este individuo frente a los estudiantes Chilenos? Y encima se anuncian el ingreso de mil nuevos militares y policías. ¿Gobierno de izquierda? La fascinación por las botas da un poquito de miedo.